Ni una más

Cuando me siento liberada solo tengo que recordar el seguimiento hospitalario de mis embarazos. Para que me revuelva lo mucho que nos queda por hacer. Para reconocer que el patriarcado se nos clava en las entrañas. Tragamos como ciencia lo que es opresión. La obstetricia es solo el espejo que refleja el deseo patriarcal de mantenernos sumisas, calladas y de piernas abiertas. La violencia obstétrica existe. En el día contra la violencia de género una ginecóloga ha violado mis derechos. Se ha negado a darme una cita para la ecografía del último trimestre (semanas 32-34) porque rechazo la visita protocolaria de la semana 31. Me niega asistencia sanitaria. Se ha limpiado el trasero con la Ley de Autonomía del Paciente: "Toda actuación en el ámbito de la sanidad requiere el previo consentimiento de los pacientes", "todo paciente tiene derecho a negarse al tratamiento", "todo profesional está obligado al respeto a las decisiones del paciente". Violencia institucionalizada de bata blanca.
Foto de http://theunnecesarean.com/
Nin unha máis
Cando me sinto liberada só teño que recordar o seguimento hospitalario dos meus embarazos. Para que me revolva o moito que nos queda por facer. Para recoñecer que o patriarcado se nos crava nas entrañas. Tragamos como ciencia o que é opresión. A obstetricia é só o espello que reflicte o desexo patriarcal de manternos sumisas, caladas e de pernas abertas. A violencia obstétrica existe. No día contra a violencia de xénero unha xinecóloga violou os meus dereitos. Negouse a darme unha cita para a ecografía do último trimestre (semanas 32-34) porque rexeito a visita protocolaria da semana 31. Négame asistencia sanitaria. Limpa o traseiro coa Lei de Autonomía do Paciente: "Toda actuación no ámbito da sanidade require o previo consentimento dos pacientes", "todo paciente ten dereito a negarse ó tratamento", "todo profesional está obrigado ó respecto ás decisións do paciente". Violencia institucionalizada de bata branca.
Foto de http://theunnecesarean.com/