martes, 7 de xuño de 2016

Dr. Braulio Zorzella y la seguridad del parto y la cesárea


Zorzella es quien sostiene la mano de la parturienta. Foto de Sam Golob

No conocía al obstetra brasileño Braulio Zorzella y me quedé fascinada. Asistí a su conferencia online organizada por el Movimento Nascer Melhor sobre la seguridad del parto y de la cesárea. El doctor comenzó explicando la evolución de la obstetricia. Recalcó que los tiempos pasados no fueron mejores, ya que morían muchas mujeres y bebés. La ciencia quería mejorar estos datos. Se había observado que, cuanto más rápido era un parto, mejor nacía el bebé, había menos complicaciones. Entonces comenzaron a aplicar técnicas para aumentar la velocidad del trabajo de parto (oxitocina, Kristeller, amniorrexis). El máximo exponente sería la cesárea. La mayoría de las muertes de bebés eran por prematuridad, infecciones o falta de oxígeno. Las mujeres morían por hemorragia, infecciones o complicaciones derivadas de eclampsia. Por eso también se incidió en la asepsia y en los antibióticos. En este primer punto influye también la mejora en las condiciones de vida en general, no solo los avances hospitalarios. Todas estas medidas disminuyeron en mucho las tasas de mortalidad. El problema fue que estas técnicas acabaron aplicándose a todas las mujeres. En este punto las taxas dejaron de descender. Todas estas técnicas ya no ayudaban sino que incluso llegaron a ser contraproducentes. Por eso, hoy en día se intenta cambiar el paradigma para que pase de una medicina basada en la estadística a una basada en la evidencia científica y centrada en cada mujer. Es la humanización del parto. 
Foto de Anna Amorim
A respecto de la cesárea, Zorzella expone que las causas de cesárea programada son pocas: VIH, herpes activo, placenta previa oclusiva total, algunos miomas. Y, salvo estos casos, no hay ningún dato que indique que sea beneficioso para el bebé, al contrario sí sabemos que perjudica su salud futura. Y para la madre también aumentan los riesgos. Insiste en que embarazo a término son 42 semanas, y no 40. Explica, y esto es estremecedor, que suele establecerse el límite en 40 semanas porque los ginecólogos que elegían cesárea tuvieron que comenzar a programar en esa semana para que no se les "pasasen" muchas mujeres sin operar (porque parían antes). Viendo que aún así perdían el 50% (50% de nacimientos antes de la semana 40 y 50% después) rebajaron hasta la semana 38. Son datos estadísticos y crean una falsa sensación de retraso en muchas mujeres sin ningún fundamento. La única manera de saber que el bebé está maduro, y con esta frase me ganó,  es cuando comienza el trabajo de parto, porque es el momento en el que el bebé da la señal a su madre de que está preparado para nacer y desencadena el proceso. Antes, será prematuro, aunque cumpla 42 semanas de gestación. En su opinión, el único momento en que hay que hacer cesárea es cuando peligra la vida de la madre o del bebé (parece obvio, ¿no?) y siempre hay que hacerla, atención a su sensibilidad, pidiendo perdón al cuerpo materno que se va a cortar y al bebé que se va a extraer sin beneficiarse del mecanismo del parto. Señala, por último, que romper este mecanismo afecta al vínculo madre-bebé. Muy acertadamente matiza que esto no significa que se sea mejor o peor madre por la vía del parto. Afecta al vínculo porque no es lo mismo comenzar una maternidad empoderada, ejemplifica, como atleta que acaba una maratón, que llegar a la meta en coche. Las dificultades van a ser más complicadas de afrontar. Quien corre 42 km no tiene problema en correr 5, pero para quien va en el coche, 5 son muchos kms. En resumen, un gusto encontrarse ginecólogos así.
Foto Sam Golob
Aquí su web http://www.brauliozorzella.com/
Las fotografías pertenencen a la entrevista realizada por Rita Lisauskas http://vida-estilo.estadao.com.br/blogs/ser-mae/medico-com-90-de-partos-normais-no-curriculum-afirma-e-possivel-nao-se-corromper-e-oferecer-seguranca-no-parto/
 

Non coñecía ó obstetra brasileiro Braulio Zorzella e quedei fascinada. Asistín á súa conferencia online organizada polo Movimento Nascer Melhor sobre a seguridade do parto e da cesárea. O doutor comezou explicando a evolución da obstetricia. Recalcou que os tempos pasados non foron mellores, xa que morrían moitas mulleres e bebés. A ciencia quería mellorar estes datos. Tíñase observado que, canto máis rápido era un parto, mellor nacía o bebé, había menos complicacións. Entón comezaron a aplicar técnicas para aumentar a velocidade do traballo de parto (oxitocina, Kristeller, amniorrexis). O máximo expoñente sería a cesárea. A maioría das mortes de bebés eran por prematuridade, infeccións ou falta de osíxeno. As mulleres morrían por hemorraxia, infeccións ou complicacións derivadas de eclampsia. Por iso tamén se incidiu na asepsia e nos antibióticos. Neste primeiro punto inflúe tamén a mellora nas condicións de vida en xeral, non só os avances hospitalarios. Todas estas medidas diminuiron en moito as taxas de mortalidade. O problema foi que estas técnicas acabaron aplicándose a todas as mulleres. Neste punto as taxas deixaron de descender. Todas estas técnicas xa non axudaban senón que mesmo chegaron a ser contraproducentes. Por iso, hoxe en día inténtase cambiar o paradigma para que pase dunha medicina baseada na estatística a unha baseada na evidencia científica e centrada en cada muller. É a humanización do parto. 
A respecto da cesárea, Zorzella expón que as causas de cesárea programada son poucas: VIH, herpes activo, placenta previa oclusiva, algúns miomas. E, salvo estes casos, non hai ningún dato que indique que sexa beneficioso para o bebé, pola contra si sabemos que prexudica a súa saúde futura. E para a nai tamén aumentan os riscos. Insiste en que embarazo a termo son 42 semanas, e non 40. Explica, e isto é estremecedor, que adoita establecerse o límite en 40 semanas porque os xinecólogos que elixían cesárea tiveron que comezar a programar nesa semana para que non se lles "pasasen" moitas mulleres sen operar (as que parían antes). Vendo que aínda así perdían o 50% (50% de partos antes da semana 40 e 50% despois) rebaixaron ata a semana 38. Son datos estatísticos e crean unha falsa sensación de retraso en moitas mulleres sen ningún fundamento. O único xeito de saber que o bebé está maduro, e con esta frase gañoume,  é cando comeza o traballo de parto, porque é o momento en que o bebé dá sinal á nai de que está preparado para nacer e desencadea o proceso. Antes, será prematuro, aínda que cumpra 42 semanas de xestación. Na súa opinión, o único momento en que hai que facer cesárea é cando periga a vida da nai ou do bebé (obvio non?) e sempre hai que facela, atención á súa sensibilidade, pedindo perdón ó corpo materno que se vai cortar e ó bebé que se vai extraer sen beneficiarse do mecanismo do parto. Sinala tamén que romper este mecanismo afecta ó vínculo nai-bebé. Moi acertadamente matiza que isto non quere dicir que se sexa mellor ou peor nai pola vía do parto. Afecta ó vínculo porque non é o mesmo comezar unha maternidade empoderada, exemplifica, como atleta que acaba unha maratón, que chegar á meta en coche. As dificultades van ser máis complicadas de afrontar. Quen corre 42 km non ten problema en correr 5, pero para quen vai no coche, 5 son moitos kms. En resumo, un gusto atoparse xinecólogos así.
Aquí a súa web http://www.brauliozorzella.com/ 

2 comentarios:

  1. Qué de informaciones interesantes! Me ha encantado. A ver si el próximo año puedo ver este congreso (y a ver si lo entiendo en portugués). Gracias por tomarte el trabajo de compartirlo. Dónde podría encontrar las referencias sobre "la evolución de la obstetricia"? Un saludo.
    Anaís D

    ResponderEliminar
  2. Anaís, las ponencias de profesionales como Odent o Pascali-Bonaro (creadora de "Orgasmic Birth") fueron en inglés con subtítulos en portugués. Sobre las referencias que preguntas Zorzella no dio ninguna bibliografía que yo recuerde. Igual puedes escribirle directamente. Me suena que en algún libro de Odent se habla también de esta evolución y en "La revolución del nacimiento" (Isabel Fernández) se hace un repaso histórico de la atención al parto. Saludos!

    ResponderEliminar